Mi Increíble Viaje a India

Parte I: Palabra mágica NAMASTE

Cuando mi hijo, Michael, y yo, llegamos al aeropuerto de India, cansados del largo viaje, nos encontramos atendidos en seguridad, por un oficial con cara seria y no amable. Sus preguntas eran en tono seco y en un momento nos dijo algo en su lenguaje.  Michael le contestó“Solo hablamos Ingles y Español, en Hindú solo sabemos la palabra Namaste”.  En segundos, la cara del señor se iluminó con una sonrisa y le preguntó:  donde aprendiste esa palabra? Michael le dijo: “Me la enseño mi mamá en el camino.  Ella me dijo que era un saludo de respeto en este país”.  El señor se sonrió y nos dijo: “Solo necesitan esa palabra y les ira bien acá”.

Tengo varios amigos que usan la palabra al final de sus mensajes o en facebook; yo no he acostumbrado a usarla porque  siembre he preferido usar nuestra bella palabra «Bendiciones».

Sin embargo, acá es otra cosa, usarla en India es entender internamente lo que significa.  Con inclinar la cabeza, juntar nuestras manos y decir «Namaste», las personas nos sonríen, atienden bien, nos dan Amor.  La palabra abre una conexión mágica con el que la escucha.  Como hemos caminado bastante, nuestros usos de Namaste son múltiples, tal cual las bendiciones que damos y recibimos en este bello país.

Namaste desde India.

 

Parte II: Paseo en elefantes

Cuando planifiqué el viaje solo incluí visitas a sitios religiosos y/o espirituales, sin embargo, a instancias del agente de viajes, incluí el paseo en elefante.  Al llegar al parque, encontramos un elefante bebe (más grande que nosotros) y nos pareció gracioso.  Posteriormente, llegamos adonde se iniciaba el paseo. Nos sentaron rápidamente en la silla de madera y comenzamos la travesía.  Inmediatamente comencé a sentir arrepentimiento de haberlo hecho.  Los elefantes cargan un gran peso encima, la tabla de madera, dos pasajeros más el chofer.  Están pintados con henna.  Caminan por un piso empedrado a través de una montaña.  No creo que sea justo que el hombre decida que esa es la vida para los elefantes.  Es triste haber sido parte de ese maltrato y ni siquiera es una experiencia extraordinaria que pueda justificar lo que esos animales sufren para ventaja de algunos.

Parte III: Tag Mahal

Una de las siete maravillas del mundo.  Construido por Shahjehan en la memoria de su amada esposa Mumtaz Mahal. Independientemente, de que para muchos es solo una hermosa construcción, realmente es amor lo que se siente en las energías de cada pared, piso o jardín.  Ha debido ser un amor grandioso el del señor hacia su esposa, para esmerarse por 14 años en construir algo tan espectacular.

Namaste por el amor que inspiró esa grandiosa obra.

 

Parte IV Rishikesh: La capital espiritual de la India

Vivir para el espíritu durante todas las horas del día.  Ese es el significado de nuestra permanencia en la primera semana en el Ashram.

Nuestra rutina es despertarnos a las 5 AM para estar en el salón de meditación a las 6 AM.  Durante media hora oramos (por supuesto, los incluyo a todos ustedes) al Dios único en el universo.  Todos los dioses son un solo Dios.  Lo que cambia es el nombre que le demos, pero sigue siendo Dios.

6.30  –  7.30 Hatha yoga

8.30  –  9.30 Desayuno en silencio

10.30 – 11.15 Cantos mantras

11.15 – 12 m Yoga en Bhagavad Gita /yoga sutras

12  –  1 Karma yoga

1  –  2 Lunch en silencio

4.30 – 6                 Hatha yoga

7  –  7.50               Ofrendas y ceremonia musical en el Ganges

8  –  8.30           Cena en silencio

8  –  9                      Meditación

9 a 5 AM               Silencio y dormir

 Los grupos de personas que llegan al Ashram son diversos, tanto en nacionalidad como en cultura.  Algunos vienen creyendo que es divertido y se encuentran que el horario es rígido, las reglas estrictas y si no hay una base espiritual en su corazón, se aburren, se quejan y comienzan a escaparse para alternar con paseos turísticos.

Michael se ha involucrado en las labores de oficina del Ashram.  Tienen un hermoso proyecto de limpieza del Ganges y él le dedica sus ratos libres.  Yo uso los míos para caminar, rezar y meditar en las orillas del Ganges.

Para nosotros, Rishikesh es hermoso, sus callejuelas son pequeñas y desiguales.  Hay monos y vacas libres por doquier.  Siempre hay tráfico y exceso de gente.  Las personas sonríen y les gusta tomarse fotos con uno.

El 5 de julio en la mañana, fui al Ganges, rece un poco, lavé mis pies y al salir encontré un mendigo que pedía, era igual a muchos, cabello y barba blanca y larga, desdentado.  Abrí el monedero y le di 10 rupias.  Es solo un dólar; sin embargo para ellos es mucho.  La limosna usual es 1 o 2 rupias.  El señor me bendijo y sentí que había algo especial en él.  Di pocos pasos, y una cantidad de niños me rodearon, querían fotos conmigo. Luego vinieron las mamás y me besaban los pies, yo no entendía.  Hasta que un señor les dijo, ya, déjenla tranquila que le van a quitar sus bendiciones.  En ese momento me voltee a ver el mendigo, ya no estaba, es  uno de los que llaman santos vivientes.  No se quedan mucho rato en ningún lugar y sus bendiciones son especiales.

Por todo el día pude sentir la energía maravillosa que ese viejito desdentado me regaló.

Parte IV Servir a otros

El sábado nos anotamos como voluntarios y nos asignaron servir la comida.  Lo hicimos por una hora y fue divertido. Al comienzo no sabíamos las tradiciones, a pesar de que nos habían servido por una semana.  Una joven renunciante del Ashram vino a ayudarnos.  Entre otras cosas dijo: “No coloquen comida cerca de los cubiertos, es una ofensa”.  «No dejen de servir hasta que la persona coloque la mano encima del plato». «No dejen que la comida se mezcle». Rápidamente aprendimos y comenzamos a recibir sus Namastes al recibir sus comidas.

Para el día domingo 8 de julio nos invitaron a participar en la inauguración del programa Planta 2500 árboles.  Temprano, después de desayunar, subimos en unas camionetas a la montaña.  Allí hay otra localidad del Ashram, que es un paraíso, una paz y energía extraordinaria.  Después de oír las charlas de la inauguración, cada asistente tomó  una planta y la sembró en un hoyo pre abierto.  Luego le colocamos una protección de bambú.  Al finalizar, recibimos una cajita con comida: papas y brócoli al curri, panes parecidos a arepitas dulces fritas y una bolita de algo azucarado para morder cuando el picante era excesivo.  Comimos sentados en el piso y con las manos.  Rodeados de los árboles recién plantados.

Regresamos al ashram cansados y satisfechos de haber colaborado con este programa tan hermoso y en beneficio del planeta.

Estas son nuestras vivencias hasta el domingo 8 de julio de 2012. 

Bendiciones para todos. Namaste desde la India.

Maria Rosario Rowan

Comments

  1. Luis G. Gómez A. says:

    Que experiencia tan maravillosa. Gracias por compartirla. Todo lo mejor para todos. Namaste…

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  2. Que linda experiencia sra, me alegra mucho que haya disfrutado su viaje al maximo, abrazos.

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  3. Debe ser fascinante aprender y vivir un poco otras culturas. Me gustó el reportaje. Saludos y Namaste!!!

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  4. Maria Rosario ¡Qué hermoso! me hiciste recordar la película y el libro «Comer, rezar, amar», Felicitaciones ¡qué experiencia tan maravillosa! ♥ Namaste ♥

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  5. Anne Bertorelli says:

    Que bello! me encanta todo los que estas haciendo y aprendiendo, espero que nos transmitas muchos de esos conocimientos, y gracias por eses Bendiciones
    Muchos besos y Bendiciones

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  6. Ximena Sarmiento Araneda says:

    Namaste María y Michael. Espero que sigan disfrutando cada segundo de esta hermosa experiencia como lo han hecho hasta ahora. Un gran abrazo y bendiciones.

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